Llora y llora, sé que tiene hambre pero no se me ocurre qué darle. La leche materna la rechaza, igual la solución. No deja de llorar.
Mientras trataba de cocinarle una papilla, me corté un dedo con el cuchillo mientras rebanaba una manzana. Sangré un poco, no dejaba de fluir el líquido. Me asomé a la cuna de bebé para ver cómo se encontraba y sus ojos brillaron ante la sangre....
viernes, 25 de enero de 2008
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1 comentario:
probando... a ver si ahora sí llega
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